Escrito con la maestría de una pluma inteligente adiestrada con el tiempo, este libro ya ocupa un lugar en la historia de Colombia. A medio camino entra la novela y la crónica, el relato de Luz García nos hunde, literalmente, en el lodo caliente del dolor y la desesperanza de quienes vivieron de primera mano, uno de las peores tragedias ocurridas en nuestro país y en el continente. Armero: Un luto permanente, es quizás el mejor texto de los cientos que se han escrito con motivo de esa pesadilla, en la que se convirtió para miles de habitantes, la serie de anuncios y predicciones que alertaban de la ocurrencia de un deshielo del volcán Nevado del Ruiz, y que a la postre fallaron por defecto, por negligencia, imprudencia o incredulidad. Pocas veces se alcanza tal nivel de agonía en un relato. Y a la vez, pocas veces se logra describir una ilusión vital, como la que desde entonces acompaña a los que sobrevivieron. El libro de Luz García es la suma de todos los sentimientos del alma humana, cuando la vida da un vuelco completo de la noche a la mañana.Escrito con la maestría de una pluma inteligente adiestrada con el tiempo, este libro ya ocupa un lugar en la historia de Colombia. A medio camino entra la novela y la crónica, el relato de Luz García nos hunde, literalmente, en el lodo caliente del dolor y la desesperanza de quienes vivieron de primera mano, uno de las peores tragedias ocurridas en nuestro país y en el continente. Armero: Un luto permanente, es quizás el mejor texto de los cientos que se han escrito con motivo de esa pesadilla, en la que se convirtió para miles de habitantes, la serie de anuncios y predicciones que alertaban de la ocurrencia de un deshielo del volcán Nevado del Ruiz, y que a la postre fallaron por defecto, por negligencia, imprudencia o incredulidad. Pocas veces se alcanza tal nivel de agonía en un relato. Y a la vez, pocas veces se logra describir una ilusión vital, como la que desde entonces acompaña a los que sobrevivieron. El libro de Luz García es la suma de todos los sentimientos del alma humana, cuando la vida da un vuelco completo de la noche a la mañana.