Sin defender ni glorificar a los guerrilleros, Malcolm Linton, el fotógrafo autor de Metamorfosis, los revela como personas con emociones, esperanzas y temores reconocibles, muy distintos de la imagen que por décadas proyectaron muchos de los medios de comunicación. La metamorfosis que el libro busca captar puede darse tanto en las mentes de quienes pasan sus páginas como en las vidas de los guerrilleros que retrata. Al reseñar, para el diario El Tiempo, la exposición de las fotos que integran este libro, la crítica Nelly Peñaranda la calificó como “una oportunidad para promover la solidaridad, el aprecio y el respeto, para desmantelar las falsedades despectivas y para trabajar por la tolerancia y la inclusión en un panorama altamente polarizado”. El libro no ofrece una descripción completa del conflicto o de las Farc, tampoco es una defensa de su ideología o de sus acciones. Es una invitación a la reconciliación nacional y la tolerancia. Metamorfosis se centra en una situación real, y en ese sentido es periodístico, pero también es metafórico. Las fotos no muestran solamente eventos históricos, sino las respuestas psicológicas a ellos; el paisaje evoca estados de la mente en vez de solamente representar el espacio físico; las imágenes en páginas opuestas se complementan o contrastan entre sí en lugar de seguir una secuencia cronológica rígida. La descripción de cada fotografía aparece en la parte posterior del libro, con el único propósito de que los lectores puedan reaccionar libremente ante las imágenes. Las palabras o frases que las acompañan esperan desencadenar una respuesta imaginativa, no una explicación.