Con sus mares congelados, sus tempestuosos desiertos de hielo y su frío gla¬cial, la región ártica es una de las zonas más inhóspitas del planeta, y uno de los lugares que más ha excitado la imaginación y los anhelos del ser humano. Acudiendo al llamado de lo desconocido, algunos de los exploradores más osados de los siglos pasados se aventuraron allí bajo temperaturas calamitosas y desafiando la banquisa, teniendo como único consuelo el sueño de cumplir con su cuota histórica de heroísmo. Mientras que, por su parte, inmersos en un entorno hostil, pero que a la vez les proveía de todo lo necesario, los habitantes nativos de este territorio desarrollaron una serie de conocimientos y de creen¬cias que les permitieron sobrevivir y adaptarse a los ritmos y a las contingencias de una naturaleza impredecible. A partir de múltiples voces, este libro nos presenta un vistazo de la vida en los confines de la tierra; y con ello, al ser humano en su estado más elemental y vulnerable, desprovisto de la seguridad de la civilización y enfrentado a las circunstancias más adversas para su subsistencia; una situación perfecta para descubrir quiénes somos realmente, y reconocer que, más que su negación, la muerte es una condición necesaria para la perpetuación de la vida.