Explorar


Géneros


Colecciones


Audiencia

Ensayo 2009

Español

Idiomas

General

Público

La guerrilla por dentro

«La primera vez que vi a Jaime Arenas fue en agosto de 1967 () Ese día, Luis Carlos Galán, me comentó: Ese tipo que ve allí es admirable. Dentro de unos años, será con gente como Jaime Arenas con la que nos va a tocar trabajar juntos o enfrentarnos. »Cuatro años después, () Jaime Arenas se había ido a la guerrilla, siguiendo sus ideales revolucionarios; había sido condenado a muerte por sus mismos compañeros del monte, había conseguido huir, había purgado una condena por insurrección, y había salido libre nuevamente. Galán, entretanto, se había convertido en el ministro de Estado más joven de la historia de Colombia. Cada uno conocía y respetaba al otro. () Entonces Galán, conversó con Arenas y se lo llevó como asesor personal en el ministerio. El domingo 28 de marzo, a las 11:35 de la mañana, mientras Arenas se dirigía a almorzar en el centro (), se le acercaron dos sujetos por la espalda y le dieron muerte cobardemente de siete disparos. La Operación Aguilucho, del ELN, se había cumplido con todo éxito.»Como líder estudiantil, Arenas participó en los movimientos más importantes de esos años. Luego fue mano derecha de Camilo Torres. Y cuando Camilo murió en el monte, Arenas se reunió a la guerrilla. Allí se encontró con una serie de factores desilusionadores, que constan en su libro, y consiguió huir poco antes de ser fusilado. Pocas semanas antes conversaba sobre estos temas con él, y me dijo más o menos: Yo sigo fiel a lo que he pensado siempre. Yo creo que es necesaria la revolución. Pero también pienso que la lucha armada no es la vía adecuada en Colombia. Hay caminos mucho más revolucionarios. Y lo peor es que mientras yo pienso en cómo cambiar este país efectivamente, de golpe acaban matándome a nombre de la revolución. »Por desgracia, así fue».»Como líder estudiantil, Arenas participó en los movimientos más importantes de esos años. Luego fue mano derecha de Camilo Torres. Y cuando Camilo murió en el monte, Arenas se reunió a la guerrilla. Allí se encontró con una serie de factores desilusionadores, que constan en su libro, y consiguió huir poco antes de ser fusilado. Pocas semanas antes conversaba sobre estos temas con él, y me dijo más o menos: Yo sigo fiel a lo que he pensado siempre. Yo creo que es necesaria la revolución. Pero también pienso que la lucha armada no es la vía adecuada en Colombia. Hay caminos mucho más revolucionarios. Y lo peor es que mientras yo pienso en cómo cambiar este país efectivamente, de golpe acaban matándome a nombre de la revolución. »Por desgracia, así fue».Daniel Samper Pizano, El Tiempo, 1971

Leer más

Temas

Bogotá

Ciudad

978-958-8461-04-5

ISBN Impreso

230

Páginas

15x23.5 cm

Tamaño

Tapa blanda o bolsillo

Encuadernación

$42,000cop

PVP

Dónde conseguirlo